Rincón de Dios
Rincones
Rincón Evangélico
Rincón Católico
Rincón Judío
Rincón Budista
Rincón Islámico
Rincón Genérico
Filosofías
Convencionales
Orientales
Contemporáneos
Meditaciones
Meditación Diaria
Consejería
Oraciones
Ayuda Espiritual
Misterios
Grupos
Textos de Ayuda
Publicaciones
Ensayos
Citas Bíblicas
Citas Filosóficas
¿Qué es el Rincón
Lea aquí la Biblia
Editoriales
Meditaciones
Huellas
Motivaciones
Para ser Santo
De la fe y sus raíces
Mensaje a los judíos
Del alma suprema
Simbolismos
"Esta es una interpretación simbólica del libro del       "Génesis" 
Con ello no pretendemos crear discusiones. Solo buscamos mostrar el mensaje encerrado detrás de la letra en las escrituras, vista desde un punto de vista espiritual y simbólico...

Ver más......


Inicio Traductor Chats Filosóficos Buscador Colaboradores Foros Filantropía
"G É N E S I S     X X I V"

1.- Y ABRAHAM ERA YA VIEJO, ENTRADO EN DÍAS; Y EL SEÑOR DIOS HABÍA BENDECIDO A ABRAHAM EN TODO.-


Ya había transcurrido una gran parte de la escenificación del concepto Abraham.
Toda su representación hasta ese momento había estado: Bien dicha, bien ejemplarizada, "bendita", hecha acorde con el ideal de perfección que él perseguía.
La bendición del Señor Dios, simboliza la confirmación de que la actuación manifestada está acorde con el principio del "SER", el "YO SOY" que dijo le Dios a Moisés que ese era Su nombre.
  • "El temor del Señor es el principio de la ciencia." (Pr 1:7)
El conocimiento del hombre empieza a desarrollarse cuando se comprende la magnificencia y omnipotencia de Dios, y se ve al hombre como una creación derivada de ese principio.

2.- Y DIJO ABRAHAM A SU SIERVO, EL ANCIANO DE SU CASA, EL CUAL GOBERNABA TODO LO QUE TENÍA: RUÉGOTE PONGAS TU MANO DEBAJO DE MI MUSLO.-

Se manifestó Abraham en sus actuaciones con el ejemplo más destacado de su conducta. Con su siervo más antiguo, con la influencia más destacada de su ejemplo, con la primera oportunidad de trascendencia que encerraba todo el conocimiento que él había podido reunir.
Esta es la guía de su altura espiritual, el principio que encierra la fe de Abram, antes de que llegara Isaac, que cambió su vida y orientación anterior convirtiéndole en Abraham por medio del pacto de la promesa.
Esta manifestación nueva pedía que la actuación anterior a Isaac, se considerase supeditada, atada, a su nueva forma de engendrar.
El muslo, simbólicamente, está relacionado con la descendencia, continuidad con la posteridad, con la base del cuerpo. Al poner su mano (símbolo de oportunidad de actuación) bajo el muslo de Abraham, en señal de pacto, marcaba la devoción hacia la continuidad ideológica de Abraham, "sentándose sobre su capacidad de conducta".
El objetivo de este pacto, estaba relacionado con la continuidad de la filosofía de la raíz santa y se establecía el lazo de seguridad, al asegurarse que la actitud de sus seguidores es el medio para alcanzar esta meta de la "tierra prometida".
De esta forma se entiende que toda forma de fe, no importa su origen, al estar inspirada por fe, está al servicio e la causa de Abraham de una forma u otra, que es hallar el camino de la promesa.
El contacto del hombre con Dios comienza por la fe. Esta se desarrolla y crece, saliéndose de sus antiguas barreras hasta hallar el verdadero camino, tarde o temprano.
Pero es indispensable que exista esta cualidad en el hombre, de lo contrario, su conducta estará movida por el deseo de satisfacción de los apetitos carnales conducentes al adormecimiento de la conciencia como fórmula de paz a los reclamos del espíritu.
No importa la naturaleza de la fe que se emplee, si esta es verdadera, ligada, juramentada, nacida de la conciencia, ésta, actuará como agenda de la fe de Abraham.
Hay mayores esperanzas para el que tiene fe, aunque sea en una piedra que lo hace mirar hacia arriba, a las alturas, que el que confía en sus manos y mira hacia abajo, creyendo que los frutos de la tierra, simbolizados por la conducta de Caín le van a abrir las puertas de lo Arcano.
Este es el simbolismo de la mano debajo del muslo, la supeditación de actuación por fe a fin de hacer fructífera la FE en la promesa que se persigue.

3.- Y TE JURAMENTARÉ POR EL SEÑOR DIOS DEL CIELO Y DIOS DE LA TIERRA, QUE NO TOMARÁS MUJER PARA MI HIJO DE LAS HIJAS DE LOS CANANEOS ENTRE QUIENES HABITÓ.-

Y se estableció el juramento, la decisión irrevocable de tener como referencia de juicio, el máximo ideal de perfección para todos los grados alcanzados y los por alcanzar.
Se hizo un lazo o condenación de que no se introduciría ninguna ley o influencias de las cosas de la carne, del mundo, simbolizado por Canaán
Esta condición o pacto, establece que toda fe debe estar orientada por el principio de tomar como forma de conducta, solo el principio de alcanzar el ideal de perfección para el hombre: LO MESIÁNICO.
Esto es, que si la fe se coloca en alcanzar bienes de naturaleza carnal, no se cumple la juramentación de la mano debajo del muslo de Abraham.
Bajo este principio se establece que la ley sirve a los propósitos de la gracia, ya que está encaminada a la eliminación del pecado, simbolizado en la Biblia por las hijas de Canaán.
Por este medio se asegura que se llegará a colocar en buena tierra la semilla de Isaac, que es el engendro del Espíritu Santo (ya que Dios se lo concedió a Abraham) en su proceso de culminar la obra preestablecida desde antes de la creación de todo lo existente.
Si la actitud del hombre al seguir cualquier ideología está cimentada en la fe de hacer lo mejor para su conciencia, esta fe le llevará, irremisiblemente, a los caminos de la fe verdadera, ya que alcanzará el contacto con los caminos más elevados a través de su fe "sincera" en el principio que persigue.
La condición principal del pacto de la fe de Abraham, está en no permitir que su hijo tome mujeres de las hijas de Canaán.
Esto traducido en términos simbólicos, significa que el objetivo principal de la fe en Dios, es huir de las cosas de la carne, no en el sentido material, sino espiritualmente. Comprenderlas, analizarlas a fin de dominarlas no dejando que controlen la guía de nuestras actitudes.
Si la conciencia es limpia, la conducta será limpia.
El ojo verdadero del hombre es su conciencia. Ella elimina los caminos verdaderos con la luz del espíritu como instrumento del alma.
Lo que miramos, debemos analizarlo con la conciencia pura de que es para beneficio de nuestra alma, partícula divina que Dios otorgó al hombre para que éste alcanzase su gloria.
Si perseguimos las cosas del mundo (las hijas de Canaán) obtendremos la paga del pecado.
Pongamos las manos debajo del muslo de Abraham y hallaremos mujer para su hijo Isaac en nuestros corazones, en nuestras conciencias donde surgirá la tierra nueva y el cielo nuevo, donde veremos la Jerusalén de arriba manifestada en nuestros caminos y en el resultado de nuestras acciones, si estas están acordes con la fe de Abraham que juramos acatar al poner las manos bajo su muslo fecundo/

4.- SINO QUE IRÁS A MI TIERRA, Y MI PARENTELA, Y TOMARÁS DE ALLÍ MUJER PARA MI HIJO ISAAC.-

Todo esfuerzo, todo contacto se debe establecer en su mismo nivel, con la misma forma ideológica que Abraham traía con sus leyes, la corriente de la raíz santa.
Esta contribuiría con sus leyes y oportunidades de actuación al logro de sus propósitos para los cuales fue concebido.
De este nivel ideológico en que Abraham se encontraba antes de su adelantamiento espiritual después de la llegada de Isaac, debían proceder las leyes y los ejemplos que Isaac tomaría para tener la certeza de no introducir influencias de la tierra de Canaán en su crecimiento y formación.
Aunque el hombre iba a ser el templo de Dios albergando el Espíritu Santo que de él procedía, aun estaba siendo usado como vaso de actuación para manifestación de la conducta de los hijos de Het. Todavía se estaba mostrando la conducta animal en el hombre como ejemplo de lo que debía ser.
Solo el pequeño espacio del campo de Efrón había sido comprado por Abraham como sepultura temporal, en espera del cumplimiento de la promesa, en cuyo tiempo Abraham resucitaría, no en forma individual, sino como parte de la fuerza espiritual que guía a los seguidores de sus pasos, en cuyas actuaciones estaría vivo el espíritu de la fe que él representaba y la participación de su concepto ideal como base de la doctrina de la raíz santa.
El resto de esta escenificación del hombre pertenecía a la descendencia de Cam, padre de Canaán. Con esto queremos señalar como el hombre es una representación de las fuerzas ideales dentro del campo de la materia.
La manifestación del VERBO, o fuerza motriz de las cosas, está siendo escenificada dentro del tiempo y espacio de la dimensión que conocemos como vida o existencia.
Esta manifestación está representando los estados ideales, en una forma material; o sea, este mundo material, es solo un reflejo del mundo ideal, que es el real y verdadero, ya que es el móvil de las cosas.
De estas formas materiales en proceso, el hombre es el paso más avanzado o manifestado que puede verse hasta el presente.
Pero este paso no esta definitivamente escenificado en su plenitud, sino que está en el medio de un proceso, cuya extensión empieza en el estado más avanzado que le precede (el animal) sin que esto quiera decir que proviniera de éste, o dejara de haber provenido de ello, y que llegará hasta el estado más evolucionado que deba alcanzar, hasta LO MESIÁNICO.
Todo lo relacionado con su estado precedente, lo animal, lo irracional, pertenece a los hijos de Het, señalado como descendencia de Canaán.
Así, lo relacionado con su estado racional, evolucionado, pertenece a LO MESIÁNICO, señalado como hijo de Dios, de cuya imagen, Abraham fue un estado material, un eslabón de la cadena que paso a resurrección al ser incorporado en la Biblia como ejemplo a seguir por otras imágenes ideales de esta idea, que son los hombres que le preceden y le precederán siguiendo sus pasos hasta alcanzar el estado Mesiánico.
Esto quiere decir, que el espíritu de Abraham está vivo en los seguidores de su fe; y aunque nos resulte difícil entender como funciona esto, sí podemos ver la diferencia existente entre los seguidores de las tendencias carnales de Canaán, y la conducta de los seguidores de la fe de Abraham, en cuyos cuerpos está vivo el espíritu de éste.
Por esto, y para que esto sea así, Abraham hace hincapié en que a Isaac se le tome mujer de su parentela, esto es, de su principio ideal ascendente, para que se manifieste el espíritu Mesiánico en el hombre, del cual él es una porción en espíritu.
Esto lo veremos a todo lo largo del camino del pueblo de Israel material y posteriormente espiritual, como manifestación de la representación evolutiva de ese estado escalonado hacia este Mesías, o núcleo ideológico de fuerzas progresivas hacia nuevos y más avanzados niveles del VERBO en acción; hasta la representación material de ESE estado ideal en evolución, hasta llegar a ser el estado Israel.

5.- Y LE DIJO EL SIERVO: TAL VEZ NO QUERRÁ LA MUJER SEGUIRME A ESTA TIERRA; ¿HARÉ EN ESTE CASO QUE VUELVA TU HIJO A LA TIERRA DE DONDE SALISTE?

Hay un nivel del alma en que no se tiene la certeza absoluta del triunfo de la fe sobre las circunstancias por lo adversas que éstas resultan a la vista material.
No se tiene claramente definido el camino a seguir, y el temor, trata de justificar el posible retorno a la posición abandonada obedeciendo al reclamo de la fe. Se aventuran respuestas sin siquiera establecer las preguntas.
Los primeros intentos del hombre por abandonar la representación de los estados anteriores, la representación del estado animal por la materia, que como dijimos es la imagen de lo ideal, se ven amenazados por el temor a no poder demostrar el estado ideal que vislumbra idealmente pero que no se ha manifestado aún.
Este temor es la salida o racionalización empleada para abandonar las exigencias y comandos que la fe, por medio de la razón, reclama.
La norma de conducta, las leyes y oportunidades de actuación nacidas de la fe de Abraham (su siervo) estaban todavía en el nivel espiritual de la tierra que Abraham había abandonado para ascender a la tierra prometida donde éste había establecido su altar a Dios.
Ya Abraham había ascendido a un nuevo nivel donde se había producido la concepción de la nueva criatura en Dios, Isaac.
Isaac era el eslabón de la cadena de ejemplos encargado de hacer visible la idea no manifestada aún de LO MESIÁNICO.
Ahora la misión de los seguidores de Abraham, era la de hacer visible la fe de éste para manifestarla evolucionarla y depurarla para preparación del paso siguiente hacia el estado Israel, donde se escenificaría lo Mesías, lo edificante de Dios, el Espíritu Santo.
Su misión era: Preparar las condiciones propicias para que hubiera un medio de desarrollo perfecto para la representación material de este estado ideal. Esta sería la mujer de Isaac.
Ahora empieza a complicarse la parábola bíblica, ya que Israel es la novia por el medio en que Isaac, LO MESIÁNICO por manifestarse, debía engendrar al hijo del hombre, haciendo visible lo invisible, al HIJO DE DIOS. Esto es, buscar la mujer ideal, el medio acertado, para poder concebir o hacer realidad lo concebido.
Pero el temor al fracaso le hacía manifestar un sentimiento de huida de la nueva fe por invisible, pensando en un retorno a la antigua concepción por visible y sujetable. VOLVER A LA TIERRA DE DONDE SALISTE.
Esta manifestación es normal para el hombre que sigue el ideal de la fe y llega al punto donde teme que su creencia sea insuficiente para escalar la nueva altura que se le presenta.
Las exigencias de elevar las viejas tradiciones depurando su apego a lo establecido en el viejo nivel para trepar, por así llamarlo, a un nuevo concepto que transformará la vieja manera de actuar, en una nueva y mejorada, con miras a la trascendencia esperada en el nuevo nivel o escalón ideal.
Por esto se manifiesta siempre el temor al fracaso produciéndose invariablemente una tendencia al retorno a la vieja fe.
Este simbolismo es claro si vemos a Isaac como un concepto evolucionado, y a la mujer que le han de buscar como una oportunidad de actuación, una nueva forma de conducta, con una forma y substancia afín y factible de amoldar al nuevo concepto, pero con una inclinación ya establecida y funcional al propósito originalmente establecido, la raíz santa.
La misión del siervo esa huir de los viejos moldes (las tradiciones humanas ya obsoletas) y acoplar el nuevo concepto, portador de la imagen nueva con un medio apropiado para el propósito de la promesa. En otras palabras, vemos aquí reflejadas la actitud del religioso de una fe, con sus ritos y tradiciones, que comprende la necesidad de abandonar su religiosidad actual por deficiente, pues se le presenta un nivel de la fe donde comprende que sus ritos y tradiciones son inútiles para alcanzar los propósitos del nuevo reclamo.
Reclamos que eran útiles y servibles ante unas circunstancias más elementales, cuando se conocían las exigencias mas depuradas de la nueva fe que se le presenta más evolucionada que la que posee, que le daba calma y valor en otras circunstancias, como dijimos, más elementales de la vida.
Pero las exigencias de la vida, en su devenir evolucionante, crea, cada vez más, nuevos temores. Las aspiraciones y reclamos son cada vez más amplios y llenos de nuevos misterios.
La encrucijada es;
    1º Seguir hacia delante sin darle importancia a las consecuencias, movido únicamente por la fe en el objetivo a realizar.
    2º Mirar hacia atrás y cerrar los ojos a los nuevos conceptos e intentar conciliarlos con las viejas tradiciones corriendo el peligro de convertirse en una estatua de sal, como la mujer de LOT (ejemplo gráfico de inconformidad y temor.
6.- Y LE RESPONDIÓ ABRAHAM: ¡GUÁRDATE DE HACER VOLVER MI HIJO ALLÁ!

La respuesta obtenida en la fe de Abraham era clara y definida: No descender jamás a las viejas tradiciones.
Ya él había ascendido con la llegada de su hijo Isaac a nuevas alturas. Ya había alcanzado el umbral de la puerta que conducía a la tierra prometida. Ahora solo era menester entrar por ella para alcanzar los nuevos cielos y la nueva tierra prometida por Dios para sus elegidos.
Ahora solo debía estar vigilante para no retroceder a los viejos estados.
Guardarse, simboliza estar vigilante mantenerse alerta y protegido. En este caso era no volver a la tierra de donde había salido.
Siempre se hace presión en lo mismo durante todo el proceso bíblico. Esta es la tragedia del pueblo de Israel escenificando el constante retorno a las viejas costumbres.
Durante todo el proceso bíblico, una y otra vez el pueblo de Israel incurre en el mismo error, sigue las prácticas de los pueblos de la tierra.. Claro que esto tiene un simbolismo y es que cada nivel espiritual, mantiene un grado de pureza hasta que las mezclas del mundo lo hace impuro.
Por esto se ve que el pueblo de Israel constantemente toma mujeres de las hijas de Canaán. Adora el becerro de oro, sacrifica a Moloch (dios de las riquezas) rinde culto a Baal (la imagen del mundo) añora la vida de Egipto (magias y supersticiones milagreras)
Por eso le ordena la vigilancia de no volver a la tierra de donde salió.

7.- EL SEÑOR DIOS DEL CIELO QUE ME TOMÓ DE LA CASA DE MI PADRE Y DE LA TIERRA DE MI NACIMIENTO, Y QUE ME HABLÓ Y ME JURÓ DICIENDO: A TU SIMIENTE DARÉ ESTA TIERRA: ÉL ENVIARÁ SU ÁNGEL DELANTE DE TI, DE MODO QUE PUEDAS TOMAR DE ALLÍ MUJER PARA MI HIJO.-

El máximo ideal de la perfección de todas las cosas, el patrón de aspiraciones más elevadas que lo hizo abandonar sus pasadas características, sus tradiciones y leyes adquiridas en el nivel espiritual anterior, en donde Abraham había sido concebido y formado primeramente, le había mostrado las otras aspiraciones.
Ahora le había manifestado una forma nueva que le enseñaba el reinado espiritual que le esperaba en su descendencia por Isaac.
El supremo ideal proporcionaría una visión de las cosas por venir (un ángel) que se manifestaría anticipadamente, de manera que pudiera establecer contacto y conocimiento de las leyes y la nueva manera de concebir las cosas. Eso produciría el reinado buscado a través de la descendencia de Isaac. Esto nos hace comprender que en el abandono de las viejas normas y el deseo de alcanzar nuevos niveles, siempre surgirá el ángel que mostrará el camino.
Se producirá la visión que Dios proveerá.
El encuentro con los nuevos niveles no se produce de una manera espontánea o fenomenal.
Siempre se han producido hechos ajenos a nuestra forma de captación usual que manifiestan el camino idóneo a tomar y que, generalmente, es ajeno a lo esperado por el hombre.
Pero es menester que cuando las depuraciones, los hechos turbulentos, que generalmente nos hacen meditar fuertemente, se produzcan y que estemos firmemente guardados de no regresar a la tierra de donde salimos. Es necesario no hacer concesiones o tomar decisiones inspiradas por el temor que nos hace retroceder en las aspiraciones de nuestra elevación ideal para alcanzar los nuevos niveles del espíritu, cayendo otra vez en la tierra de donde salimos.
Nuestro nuevo ideal (nuestro Isaac) debe encontrar las soluciones y los niveles de actuación propicios para desarrollarse plenamente, a fin de alcanzar el logro de las aspiraciones que este nuevo ideal manifiesta.
Siempre debemos aguardar al ángel que Dios proveerá; la visión del mismo solo puede alcanzarse por medio de la fe y la vigilancia de no caer en la misma tierra del pasado.

8.- Y SI LA MUJER NO QUISIERE SEGUIRTE, ENTONCES ESTARÁS LIBRE DE ÉSTE, MI JURAMENTO, CON TAL QUE NO HAGAS VOLVER MI HIJO ALLÁ.-

Si esta oportunidad de actuación, estos principios y leyes provenientes de la raíz santa, como Abraham lo es, no toman el nuevo camino y dejan de seguir los principios encerrados en el nuevo concepto (Isaac) entonces queda roto el pacto.
Esta es una reafirmación de los establecido anteriormente en Abraham. Agar no debía heredar la promesa, sino Sara. La raíz santa no debía perderse. La intervención de Dios produjo el cambio deseado y necesario en el simbolismo del ángel que anunció a Abraham el nacimiento de Isaac por medio de Sara. Volvemos a repetir las mismas condiciones que veremos una y otra vez en la Biblia de no retornar a la tierra de antes. Los pasos adelantados no deben reanudarse.
La ley debe quedar atrás para que se pueda manifestar la gracia. Lo ritual debe eliminarse y tener la convicción absoluta de que Dios proveerá el nuevo camino sin que tengamos que volver atrás a los viejo rudimentos del mundo, a los dogmas sectarios y a las doctrinas litúrgicas que crean divisiones entre los hombres por mostrarse diferentes a las demás religiones. La meta es la nueva tierra.
No es la salud del cuerpo lo que buscamos en la Biblia, sino la salud del alma, que es la que mueve y ordena al cuerpo en sus acciones. Agar representa el cuerpo, Sara representa el alma.
Estos símbolos profundos y definidos, una vez que se comprenden, nos deja ver claramente el propósito de la promesa.
Toda forma ritual es el temor de velar qué acontece al cuerpo y el deseo de permanencia en éste.
Las enseñanzas bíblicas y los ejemplos de los maestros avanzados en las cosas de Dios no muestran el camino hacia el alma, donde el cuerpo es solo el medio y no el fin.
La lección es dura, no cabe dudas. Solo la fe puesta en la misericordia de Dios hace posible mantener una fe tan difícil de aceptar por incomprensible a nuestros débiles sentidos.
Este es el pacto y a la vez, la promesa de Abraham con su siervo fiel: No tomarás mujer de Canaán para su hijo Isaac. No pensar en la continuidad de la carne como propósito final, sino en la continuidad del espíritu.
Buscar por los caminos del alma, que es el hálito de vida que Dios otorgó al hombre en el día de su creación.
Por esto es menester:
    1º Huir del cuerpo y sus reclamos esclavizantes.
    2º Seguir el espíritu por los caminos del alma, por la senda de luz, sin obscuridades, sin magias, sin poderes ocultos, sino con la entereza de alcanzar la expresión del amor.
    3º Sin contiendas, sin celos, sin envidias, sin luchas y vanas porfías, sino con el firme propósito de comprender donde reside la naturaleza de la luz, aunque esto implique la muerte del cuerpo si esto fuera necesario; como lo hizo Abraham entregando a su hijo Isaac como sacrificio a Dios, dejándonos alegóricamente la huella de sus pasos hacia la presencia divina.
9.- Y PUSO EL SIERVO SU MANO DEBAJO DEL MUSLO DE ABRAHAM, SU SEÑOR, Y LE JURÓ SOBRE ESTE ASUNTO.-

Y se estableció la supeditación de los seguidores de Abraham. Se señaló una conducta comprometida con la oportunidad de descendencia del hombre partiendo de Abraham.
Así, se marcó una vocación u dedicación absoluta con el fin de cumplir la promesa de éste con la raíz santa.
La mano debajo del muslo, repetimos, simboliza el poner la actuación (la mano) al servicio de los fundamentos transmisibles de Abraham. La mano es símbolo de posibilidad de actuación, la facultad de poner en práctica algo.
El muslo es base y fundamentos de una norma de conducta.
Este acto establece que los seguidores de Abraham tienen la firme voluntad de ponerse al servicio de la promesa para conseguir la mujer de Isaac, de la parentela de éste, y no de las hijas de Canaán. O sea que una vez seguido el camino de la fe, se establece la decisión de alcanzar la gracia y el hacer abrir la puerta de entrada al establecimiento de Jerusalén, la de arriba.
Este es el inicio de las bodas de Israel con Dios (Véase Cantar de los Cantares) de donde nacerá el hijo de Dios, "LO MESIÁNICO".
Esto, traducido a términos simbólicos, significa que la forma del hombre poder alcanzar su plenitud, es por medio de comprometerse a la fe de Abraham, de no tomar mujer de las hijas de Canaán; no unirse a las tradiciones y costumbres del mundo.
Alejarse de la conducta que reina en el mundo e ir a buscar la conducta que logrará la unión perfecta del hombre con Dios para que nazca en su corazón el Espíritu Santo de la promesa que le hará llegar a la tierra prometida para su alma.
El Mesías simboliza el descubrimiento de estos caminos. Es el momento en que se logra la comprensión de que existe ese camino.
En ese instante en que nace la determinación de seguir los caminos de la fe como vía hacia la verdadera vida para el alma, nace LO MESÍAS en el corazón de este siervo fiel.
Este Mesías, no es una forma humana, sino una imagen ideal de lo perfecto para el hombre, y que se ve claramente en la mente de los seguidores de la fe de Abraham y lo lleva a establecer sus bodas simbólicas con Dios, para que nazca el hijo que Dios engendrará en su corazón a cambio del viejo hombre de pecado.
Pura metáfora, parabolismo lírico usado por los profetas con tal libertad, que a veces se hace incomprensible aún para los más avanzados en el conocimiento de las escrituras; y que a veces es causa de confusiones e interpretaciones, que aunque honestas en la mayor parte de las veces, son causa de contiendas y discusiones al formarse sectas y religiones que combaten con sus interpretaciones unas contra las otras, aseverando cada una de ellas ser la portadora de la verdad absoluta.
Es menester huir de las hijas de Canaán que son la ira, la contienda, la envidia, la inmisericordia, la incomprensión, el odio, la impiedad y todos los atributos que hacen del hombre un engendro satánico. padre de las guerras y pasiones que llenan de nubes el firmamento claro del Espíritu Santo de la promesa
Es necesario, repetimos, poner las manos debajo del muslo de Abraham, y prometerle que no se ha de buscar mujer de las hijas de Canaán para su hijo Isaac (Nuestra alma) que es la promesa de encuentro con Dios cuando Éste nace en nuestro corazón. Que nos muestra que el camino de los padres, son el símbolo perfecto establecido por Dios para "EL HOMBRE".
Debemos tomar todos estos símbolos como imágenes metafóricas, para que nos ayude a encontrar el camino de la fe, y no, como ídolos inútiles de forma externa, hacernos instrumentos de nuestras peticiones materiales que irremisiblemente nos lleva a la tierra de Canaán con sus ídolos vanos.

10.- ENTONCES TOMÓ EL SIERVO DIEZ CAMELLOS, DE LOS CAMELLOS DE SU SEÑOR, Y FUE LLEVANDO CONSIGO DE LO MEJOR DE TODOS LOS BIENES DE SU SEÑOR. LEVANTÓSE PUES, Y FUE A MESOPOTAMIA, A LA CIUDAD DE NACOR.-
Se preparé la búsqueda con los elementos simbólicos de tránsito en el desierto (en las ausencias de las doctrinas)
El diez es el número de depuración que contiene los principios de lo perfecto. Es el múltiplo del UNO. Este número está asociado con momentos de cambios, con ejemplarizaciones evolutivas.
Esto lo tomamos partiendo de que las dos manos tienen diez dedos para manifestarse, los pies tienen diez dedos para andar los caminos equilibradamente, los diez mandamientos forjan cambios en el espíritu, las diez plagas establecen presiones para lograr cambios, en fin, todas las veces que vemos el diez, lo vemos como posibilidades de tránsito de un estado a otro.
Los diez camellos de su señor son la fuerza de soporte durante el paso del desierto existente entre las dos alturas (la ley y la gracia) Posteriormente serán los dos montes que Moisés señalara como Ebal y Gerishim, al dividir las tribus de Israel en dos grupos, los hijos de las siervas Bilha y Zilpa, y los hijos de Lea y Raquel por el otro; uno para bendición y el otro para maldición.
Pero no adelantemos los acontecimientos y vayamos por partes.
El desierto, sabemos, simboliza la aridez de recursos de aprendizaje la falta de una doctrina definida, sed de justicia.. Es el terreno experimental donde ocurren las tentaciones y las pruebas. Donde se depura el pueblo de Israel durante cuarenta años (una generación) donde se reciben los mandamientos por medio de Moisés (sacado de las aguas)
En la búsqueda de la condición ideal perfecta para buscar las posibilidades de actuación propicia para el ideal nacido de la promesa de Dios (encontrar mujer para Isaac) el siervo (los seguidores de la fe de Abraham) llevaban los mejores ejemplos provenientes de Abraham, las muestras de su tesoro espiritual. Con estos tesoros en su haber se movió de la altura que sustentaba Abraham hasta el grado que sustentaba Nacor, su hermano de concepto, proveniente de la raíz santa igual que él, aunque la diferencia en la búsqueda del fin se manifestó posteriormente en Abraham, donde recayó la fuerza de la fe y la responsabilidad de la promesa.

11.- E HIZO ARRODILLAR LOS CAMELLOS FUERA DE LA CIUDAD, JUNTO AL POZO DE LAS AGUAS, A LA HORA DE LA TARDE, CUANDO SALEN LAS MOZAS A SACAR AGUA.-

Llegó al final de la etapa de transición y puso los elementos de búsqueda y transición (los camellos) en posición de pedir o entregar lo buscado (de rodillas) antes de entrar en la altura espiritual de Nacor. En la fuente de aprendizaje de donde éste se nutría y calmaba su sed de justicia (pozo)
El pozo de las aguas es la fe que sustenta una ideología. Es la fuente de conocimientos y base de los conceptos que forman una filosofía, creencia o religión.
Las mozas representan leyes u oportunidades de actuación que simbólicamente toman las enseñanzas del pozo de las aguas, y las transmiten a los seguidores de la fe (las ovejas) o sea a los seguidores de esa fe que ellas cuidan y alimentan.
Al analizar simbólicamente todos los términos bíblicos, entramos en un terreno puramente simbólico, donde todas las palabras se interpretan como símbolos, creando imágenes que forman un mundo extra-dimensional, con escenas más allá de lo presentado gráficamente.
La ciudad de Nacor la vemos como una altura espiritual, una percepción del mundo con las limitaciones y los logros que el hombre de ese grado o nivel espiritual sustenta.
Tiene un pozo de agua donde beber las enseñanzas que luego practica. Tiene sus mozas: que son las leyes y principios que alimentan la fe de las ovejas; en fin, es toda una imagen ideal, donde cada palabra es un elemento de conformación de esa imagen, a las cuales les buscaremos sentido hasta que encajen perfectamente y podamos tomar la enseñanza que dicha imagen muestra.
Si se habla de una piedra, ya que analizamos el uso de la piedra en esa imagen y puede haber tropiezos, impedimentos o base firme de una estructura filosófica.
Buscando el análisis simbólico de cada palabra, la imagen va tomando forma y nos muestra interpretaciones ocultas que dan un sentido diferente a las escrituras bíblicas que exteriormente parecen a veces infantiles, legendarias y hasta sin sentido. Y esto lo vemos ya ampliamente utilizado por los profetas en sus escritos parabólicos y llenos de doble sentido.
Ellos hablan de los lomos de Abraham como base o soporte de los por venir, en fin, todos los términos simbólicos conjugados libremente.
Esto es una muestra de cómo analizar las escenas de los primeros capítulos como imágenes ideales, con una escritura encerrada detrás de la otra, con un significado tan profundo, que parece irreal u a veces difícil de creer que esto sea así y no una pura coincidencia.
De esta forma, el siervo de Abram, que simboliza los derivados del concepto Abraham antes de recibir la promesa en Isaac, tenía, simbólicamente, la misión de enlazar las oportunidades de actuación de los niveles más bajos (MESOPOTAMIA) pero que tenía inclinación ideal de la raíz santa, con Isaac, la promesa de la tierra anunciada.
Rebeca será esta oportunidad del hombre de ascender a mejores niveles del espíritu. Esto señala, en esencia, lo que posteriormente debía ocurrir con los pueblos gentiles de la tierra, que tendrían la oportunidad de conocer los caminos de la promesa por medio del carnero que Dios proveyó como intercambio por Isaac.
¿Confuso? ¿Difícil creer que esto sea así? Tal vez, pero el hecho cierto es que todos estos símbolos se realizaron y se manifestaron posteriormente. Una evidencia de ello es el pueblo de Israel hasta el día de hoy y la difusión de todos estos hechos en todos los pueblos de la tierra por medio de la Biblia que sirve de orientación tanto a judíos como a gentiles aunque en distintos aspectos, pero con el mismo fondo para ambos.
Es como si el molde de una obra estuviese hecho de antemano en espera de la mezcla apropiada de los materiales que mostrarán posteriormente la obra ya realizada después de pasar por el proceso de la misma.
De esta forma, las escrituras tienen vigencia interpretativa en cualquier época y en cualquier etapa en que se haga uso de la parábola, siempre tomando en cuenta el avance espiritual del que las interpreta. Unos a una altura sublime, y otros a un nivel elemental, pero profundo y maravilloso para ambos; cada cual de acuerdo con sus posibilidades.

12.- Y DIJO: ¡OH! SEÑOR, DIOS DE MI PADRE ABRAHAM, RUÉGOTE ME DEPARES BUEN ENCUENTRO HOY, Y QUE USES DE BENEVOLENCIA PARA CON MI SEÑOR ABRAHAM.-
La manifestación del siervo de Abraham fue: copiar la fe de su señor.
Su ideal para alcanzar sus aspiraciones era Abraham, lo consideraba su intermediario, ya que lo llamaba su señor. Tenía señalado llevar a cabo el enlace de Isaac, la promesa de alcanzar la gracia y oportunidad de actuación de la raíz santa, Rebeca.
Entonces pidió benevolencia. Benevolencia significa buena voluntad, inclinación favorable. Bene = buena, volencia = voluntad.
Esas eran las aspiraciones de los seguidores de la fe de Abraham. Tener benevolencia de Dios, alcanzar una inclinación favorable de los acontecimientos para que se facilitara el encuentro y la solución de la misiva.

13.- HEME AQUÍ EN PIE JUNTO A LA FUENTE DE LAS AGUAS, Y LAS HIJAS DE LOS HOMBRES DELA CIUDAD ESTÁN SALIENDO A SACAR AGUA.-

Su posición quedó establecida en contacto con la fuente de enseñanza y aprendizaje representada por la fuente de las aguas.
Ahora se encontraba en aquel nivel espiritual adonde él debía llevar a cabo su misión.
Las leyes de continuidad y vigencia de aquel medio se nutrían de las filosofías representadas por aquellas fuentes de aguas. Era necesario establecer entre todas las actuaciones de aquel medio cual era la que debía escogerse para ponerla en contacto con la raíz santa de Isaac.
Este es un momento de gran decisión en la vida del hombre cuando comprende que debe casar su alma con Dios. Tiene la facultad de empezar a tener conciencia de todos los tipos de conducta que se le presentan para hacer su selección definitiva y como encaja en ese propósito.

14.- SUCEDA PUES, QUE LA JOVEN A QUIEN YO LE DIJERE: ABAJA TE RUEGO TU CÁNTARO PARA QUE YO BEBA; Y ELLA RESPONDIERE: BEBE TÚ, Y TAMBIÉN A TUS CAMELLOS DARÉ DE BEBER; SEA ESTA LA QUE DESIGNASTE PARA TU SIERVO ISAAC; Y EN ESTO CONOCERÉ QUE HAS USADO BENEVOLENCIA PARA CON MI SEÑOR.-

Queda establecido que el contacto con la ley (entiéndase: la joven) con la manera de hacer las cosas que produzca un alivio a la ansiedad (calme la sed) a una forma de compensación por las tensiones y una manera de ayudar a mantener vigentes los soportes de dificultad ante la ausencia de respuestas (simbolizado por los camellos) sea el contacto esperado.
Los camellos simbolizan esta ayuda o soporte que se tiene para pasar por los momentos en que se tiene una ausencia de conocimiento y falta de elementos de depuración en la existencia.
El desierto, dijimos, es esta zona de ausencia de facilidades, escasez de facultades definitivas para enfrentar lo presente. Es cuando nada parece tener objeto de ser en lo que conocemos como la vida. Cuando todo brillo, todo esplendor, todo parece seco y sin vida. Es la vacuidad de todo lo que nos rodea, donde surgen las tentaciones de tomar cualquier camino, aunque sea vedado, con tal de darle sentido a la ruta para salir de esa nulidad.
Un camello puede ser cualquier ideología o vocación que sirva de vehículo para hacer transitable el árido recorrido.
El siervo de Abraham había llegado a una situación en que parecen positivas las distintas características de conducta del hombre del mundo. Aquella fuente representaba las ilusiones y aspiraciones de la que se nutrían los moradores de aquel nivel.
Allí tomaban fuerza renovadora los habitantes de aquella tierra.
Por eso el siervo, simbólicamente, establece que la actitud que se presente como propiciatoria de un alivio a las necesidades de su viaje hacia el enlace con la promesa, sea la señal de relación apropiada para iniciar la comunicación o conexión con los conceptos portadores del camino de la promesa (Isaac) Este contacto debe producir una forma de conciencia proveniente del máximo ideal de perfección; como un estado de voluntad positiva que propicie la manifestación evolutiva del concepto, con las leyes que marcan el orden proveniente de la raíz santa también.
Esto es, propiciar la reunión entre Isaac (el ideal) y Rebeca (el medio) Hacer que el concepto para alcanzar la perfección Mesiánica que representa Isaac, tenga la posibilidad de ponerse en práctica por medio de las leyes de vida representadas por Rebeca.
Esto simplemente es tomar la decisión de encontrar la forma de conducta apropiada para alcanzar los planes de Dios, las actitudes que muestren un alivio al espíritu, no a la carne. Llevar a cabo un propósito o plan preconcebido.

15.- Y FUE ASÍ, QUE ANTES QUE ACABASE DE HABLAR, HE AQUÍ A REBECA QUE SALÍA CON SU CÁNTARO AL HOMBRO; LA MISMA QUE HABÍA NACIDO A BETUEL HIJO DE MILCA, MUJER DE NACOR, HERMANO DE ABRAHAM.-

No había terminado aún de hacer su manifestación plena y sintió la presencia positiva de aquellas leyes, trayendo los medios de captación y obediencia (cántaro de agua) sobre sus posibilidades de resistencia (simbolizado por sus hombros)
Y aunque el siervo no conociera la forma de conducta (virgen, no engendrada aún) no puesta en practica todavía, comprendió que era la precisa para su búsqueda.
Ella provenía de un concepto que a su vez era el producto de la raíz santa.
Esta era una relación perfecta, directa, sin mezcla ni mistificaciones con las hijas de Canaán Ésta se presentaba en toda su potencia, con todas las señales positivas para realizar el enlace espiritual con el concepto Isaac para que se produjeran las condiciones para la creación del estado "Israel".
En toda evolución se hace patente que existe la intervención de Dios. Esto es para dejar bien sentado que la evolución del hombre es el producto de la voluntad de Dios y no el producto del azar. Vemos como las circunstancias son propicias en el momento indicado para que se manifieste un suceso acorde con las necesidades requeridas.

16.- Y LA JOVEN ERA DE MUY HERMOSO PARECER, A LA QUE NO HABÍA CONOCIDO VARÓN; Y BAJÓ LA FUENTE, Y LLENÓ SU CÁNTARO, Y SUBÍA.

Esta ley u oportunidad de actuación tenía un gran poder de atracción; Era puro su contenido original, sin ningún concepto o influencia ideológica proveniente de la carne (Canaán)
No había sido contaminada con ninguna otra ideología, estaba virgen.
Y se presentaba tomando su sustento de su fuente espiritual, llenando sus medios de captación con las enseñanzas cotidianas de aquella fuente no contaminada.

17.- CUANDO CORRIÓ EL SIERVO A SU ENCUENTRO, Y DIJO: RUÉGOTE ME DES A BEBER UN POCO DE AGUA DE TU CÁNTARO.-

La representación del enlace de Isaac, concepto de la promesa futura (el siervo) hizo el acercamiento y contacto con la oportunidad de trascendencia y vigencia (Rebeca) Rápidamente le manifestó el deseo de tomar los sustentos de aprendizaje cotidianos de aquella virgen (del cántaro de sus aguas)
Esto confirma la parábola profética:
    "Todos los sedientos venid a las aguas." (Is 55:1)
Hay tres elementos simbólicos de suma importancia en la Biblia: Y son: el agua, la sangre y el fuego. De manera que la interpretación de las fuentes, los pozos de agua y todo lo relacionado con estos términos se identifican claramente con el espíritu de las cosas, con el sustento de la raíz santa con la fuerza vital proveniente de Dios.
El agua, en la Biblia, es el elemento de cambio, purificación, eliminación de impurezas y limpieza más usado.
Es uno de los tres elementos simbólicos que representan el testimonio hacia Dios.
La interpretación de estos elementos en su sentido literal, conduce a oscuridades y vacíos.
La esencia profunda de las escrituras yace oculta detrás de las palabras que son símbolos, cuya interpretación nos es otorgada haciendo uso de las parábolas, trayéndolas a la luz para despojar de su sentido mágico y cabalístico, haciendo comprensiva su interpretación como imagen representativa de las cosas y no como las cosas mismas.
De donde la circuncisión, los sacrificios de animales, los lavatorios y cualquier otra analogía, no tiene ningún valor espiritual, mas que como recordatorio del fondo verdadero de dichas cosas.
Estos símbolos no tienen poder alguno, cuando son usados literalmente queriendo mejorar el espíritu, que es la condición fundamental del hombre, que es movido por su alma a través de su espíritu.

18.- Y ELLA RESPONDIÓ: BEBE SEÑOR MÍO; Y SE DIO PRISA A BAJAR EL CÁNTARO SOBRE SU MANO, Y DIÓLE DE BEBER.-

La reacción de la ley con la influencia de la raíz santa (Rebeca) reconoció la influencia del ideal que le pedía sustento (el siervo de Abraham) y le llamó Señor mío, no dudando poner al servicio de aquel reclamo la oportunidad de aprendizaje y enseñanza (el cántaro de agua) que le mostró su actuación (simbolizado por la mano)
Y le transmitió su esencia de vida (el agua) que recogiera en aquel nivel espiritual (la fuente de las aguas presentes)

19.- Y LUEGO QUE ACABÓ DE DARLE DE BEBER, ELLA DIJO: TAMBIÉN SACARÉ PARA LOS CAMELLOS HASTA QUE ACABEN DE BEBER.-

Después de transmitirle la cantidad de orden y enseñanzas, así como las respuestas conciliatorias (simbolismo de beber) se manifestó abundante para calmar las ansias y necesidades que manifestaban los conceptos encargados de mantener los momentos de cambios y pruebas a través de la dura marcha de un nivel a otro en medio de la ausencia de doctrinas y respuestas (todo esto simbolizado por darle de beber a los camellos)
Esta manifestación de la ley representa simbólicamente la facultad de los mandamientos de poder hacer llevadero los embates de la vida durante la marcha a través de la aridez de los conocimientos en un nivel de naturaleza puramente carnal.
La ley es el ayo, la nodriza que sirve para llevar a la criatura a la adultez espiritual, toda vez que las prohibiciones del pecado facilitan el camino hacia la virtud.
Esta era la señal esperada por el siervo de Abraham, la comprobación de la fe esperada frente a la fuente de las aguas.

20.- Y VACIANDO PRESTAMENTE SU CÁNTARO EN LA PILA, CORRIÓ OTRA VEZ AL POZO PARA SACAR AGUA, Y SACÓ PARA TODOS SUS CAMELLOS.-

Enseñando todas sus facultades de enseñanza y aprendizaje, poniéndolas al alcance del enviado de la promesa para calmar sus inquietudes, se mostró capaz de suplir el Espíritu Santo a los elementos de soporte que ayudan en la travesía de un nivel a otro (todo esto simbolizado por el agua para los camellos)
Quiere decir que se mostró factible a suplir conocimiento y enseñanza a estos vehículos de soporte. Hay razonamientos justificantes que sirven para soportar situaciones difíciles. Estos razonamientos podemos llamarlos los "camellos de ayuda" para la travesía de los momentos tribulatorios.
"Dios sabe lo que hace" "No hay mal que por bien no venga" "Detrás de la tormenta viene la calma" Etc. Son como los camellos para la dura brega de la vida.
Al igual que toda idea combativa que sirve para exponer nuestras ideas en confrontación con otras se puede llamar caballos, la espada es todo razonamiento que anula otras idea y principios haciéndolos inservibles y obsoletos. De igual forma, los jinetes son los ejemplos que sirven para conducir una idea combativa a su manifestación plena. Siendo los líderes de los movimientos bélicos los jinetes que se "montan sobre sus servidores" para llevarlos a la batalla que ellos conducen.
Todos estos ejemplos de los símbolos interpretados que exponemos en esta interpretación, aunque no vienen al caso ahora, lo hacemos para mostrar la manera de usar la metáfora para interpretar las escrituras de la misma manera que lo hacían los profetas.
De esta forma no luce tan descabellada y caprichosa la interpretación que hacemos de todos estos pasajes que parecen no tener importancia y que, una vez descifrados, tienen un mensaje oculto para la mente escudriñadora.

21.- Y EL HOMBRE, FIJANDO EN ELLA LA VISTA, CALLABA, POR SABER SI EL SEÑOR DIOS HABÍA PROSPERADOS SUS CAMINOS.-

El concepto siervo, analizó el contenido de aquella oportunidad de vigencia y posibilidad de manifestación de la raíz santa.
Quería tener la certeza de que aquella oportunidad de vida (la moza, Rebeca) que se mostraba radiante y propicia a calmar los reclamos del emigrante tenía verdadera ascendencia de la raíz santa. Si provenía del máximo ideal de perfección o si no era más que una falsa ilusión de las vanas promesas de vida provenientes de la carne que tan fácilmente engañan al hombre hundiéndole en sus deseos.

22.- Y SUCEDIÓ QUE COMO ACABASEN LOS CAMELLOS DE BEBER, TOMÓ EL HOMBRE UN PENDIENTE DE ORO, DE MEDIO SICLO DE PESO, Y DOS BRAZALETES PARA PONER SOBRE SUS MANOS, EL PESO DE DIEZ SICLOS E ORO.-

Cuando los conceptos de resistencia quedaron compensados y revitalizados, el conciliador (el siervo de Abraham) estableció una prueba de pertenencia. El pendiente de oro simboliza vasallaje; significa que debe escuchar las indicaciones de quien lo otorga. Este pendiente es una señal de afiliación y pertenencia a quien lo adjudica.
Los dos brazaletes para sus manos, simbolizan el esplendor, lo destacada que debe ser la actuación engalanada para que luzca vistosa.
Al señalar que son diez siclos de oro, indica una muestra de que servirá para transición de conducta, ya que el diez es una forma evolutiva de hacer las cosas como dijimos anteriormente.
Estos dos términos se ven claramente definidos n los escritos de los profetas y también en la formación del becerro de oro en el desierto, donde las mujeres del pueblo de Israel dieron sus aretes y zarcillos para la formación del ídolo al cual adoraron en ausencia de Moisés.
Así mismo, en Is 3: 19-24 expresa estos adornos como piezas de destaque a una actitud a lucir esplendorosamente.
Con estos presentes, el siervo, representante de la fe de Abraham, quiso confirmar la unión de ambos.

23.- Y DIJO: ¿DE QUIÉN ERES HIJA? DIME, TE RUEGO, SI HAY EN CASA DE TU PADRE LUGAR DONDE PODAMOS POSAR.

Volvió a manifestarse su necesidad de conocimiento de la raíz de aquella oportunidad de trascendencia que se presentaba como no comprometida a otro ideal (virgen)
Debía saber si existía la posibilidad de alcanzar el reposo, un punto de perfección y protección contra las inclemencias de la existencia.
Este se hallaba allí solo temporalmente, con el solo propósito de alcanzar la vigencia necesaria para el nuevo ideal nacido de la fe de Abraham (Isaac)
En toda esta representación simbólica, se ve la necesidad de búsqueda y esfuerzos necesarios de un ideal para alcanzar su metal.
La búsqueda afanosa y los tropiezos por alcanzar las condiciones propicias.
Tener la certeza de no emprender una tarea antes de encontrar el medio y las afinidades que pueden haber en esas influencias o tareas. En suma, tener la aprobación absoluta de no desviar el propósito para lo que tenemos señalado en la existencia, seguir la raíz santa.
Solo una meta es aceptable y hay que buscarla donde esta se manifieste sin lugar a dudas.
Aunque un desierto de ansiedades y tentaciones se interpongan en el camino.
Este es el simbolismo de las confirmaciones del siervo de Abraham que nos ilustra del cuidado de selección que debemos tener al buscar el medio propicio donde manifestar el ideal perseguido. Tener la certeza absoluta de que la dirección de nuestros esfuerzos está en la ruta correcta y que el medio de manifestación de nuestros ideales son los acertados.
Es fácil dedicar todos los esfuerzos y aspiraciones en aras de un principio, donde al final se ve la vanidad de los resultados obtenidos de vanaglorias y compensaciones vacías en una lucha estéril, donde no se alcanza la fuente de las aguas del Espíritu Santo.

24.- Y ELLA LE RESPONDIÓ: HIJA SOY DE BETUEL, HIJO DE MILCA, QUE PARIÓ ELLA A NACOR.-

La manifestación de ella mostró su procedencia directa de la misma raíz santa de la cual Abraham procedía. Ella estaba claramente identificada con la genealogía a la cual se le da tanta importancia al hacer claro que hay dos tendencias en pugna durante todo el proceso bíblico. Caín y Abel, Sem y Cam. Siempre se hace una diferenciación bien definida entre el hombre movido por la carne, el instinto (Canaán) y el hombre movido por la fe en el Espíritu Santo (Israel)
La raíz santa es el Espíritu Santo. Desde sus manifestaciones más primitivas, siempre movidos por la fe, y representado por los hombres desde Seth, hasta la manifestación de lo mesiánico.
La raíz de la carne es el mundo. Desde la rebeldía de Caín y su manifestación individualista que no vaciló en matar a su hermano Abel para ser el único heredero, simbolizando la actitud del hombre carnal matando el espíritu obediente a Dios representado por Abel su hermano.
En este caso ella destacó ser hija de Betuel, hija de Milca, que parió ella a Nacor, hermano de Abraham, descendiente directo de Sem; destacando su procedencia directa de la raíz santa.

25.- LE DIJO ADEMÁS: TAMBIÉN TENEMOS PAJA, Y ASIMISMO FORRAJE EN ABUNDANCIA, Y LUGAR DONDE REPOSAR.-

Manifestó así mismo su contenido de situaciones y experiencias sin trascendencia que alimentan y sostienen las vivencias simples de la existencia (simbolizado por la paja)
Señaló tener sustento de las naturalezas inferiores que conviven y enmascaran los principios fundamentales para hacerlos más pasables (simbolizado por el forraje)
Existía pues, en ella todas las condiciones necesarias para permanecer en aquel nivel inferior sin contaminarse con el medio; aguardando por los grados superiores a los cuales sería llamada al contacto con Isaac y la promesa de vida superior que el emisario portaba.

26.- ENTONCES POSTRÓSE EL HOMBRE Y ADORÓ AL SEÑOR DIOS.

Postrarse, simboliza el reconocimiento de algo en lo que se confía y se acepta como superior.
Al reconocer todos los factores necesarios para cumplir su encomienda se entregó plenamente a la tarea de mostrar los dictados que el máximo ideal de perfección (Dios) le manifestara ideológicamente. La adoración es el acto de representar fielmente acompañando "lo hecho con lo dicho".
Es la entrega absoluta de voluntad y acción hacia lo anhelado y que se adora.
Es menester señalar la diferencia entre adorar y admirar.
Hay ejemplos de fieles que admiran a Dios, pero no le adoran.
ADORAR: Es cumplir sin reserva. Es la fe puesta en práctica. Obrar fielmente.
ADMIRAR Es desear, pero sin obrar para alcanzar lo admirado.
El hombre representado aquí por el siervo Abraham, se postró (reconoció) y adoró; se entrego plenamente al dictado de su ideal de perfección (Dios)

27.- Y DIJO: ¡BENDITO SEA EL SEÑOR DIOS! EL DIOS DE MI SEÑOR ABRAHAM, QUE NO HA APARTADO SU BENEVOLENCIA Y SU FIDELIDAD DE MI SEÑOR, ESTANDO YO EN EL CAMINO, GUIÓME EL SEÑOR DIOS A LA CASA DE LOS HERMANOS DE MI SEÑOR.-

Su ejemplo fue mostrar al Señor Dios como bendito, bien ejemplarizado.
Como la base de sus principios y doctrina, la fe de Abraham, que no se separaba de su buena voluntad y su deseo invariable de copiar a plenitud su ejemplo de fe como lo bien hecho, lo perfecto a seguir.
Pues fue la fe de Abraham la que le hizo obrar en ese sentido, haciéndole alcanzar el fin que tenía señalado en esta fe. Esta es la manifestación de la comprobación de los resultados del obrar por fe.
El fin que tenía señalado era el de servir de enlace entre Isaac y Rebeca, su destino a través de la raíz santa.
Cruzó el desierto de las dudas y las tentaciones que instan a abandonar la búsqueda de la meta ideal anhelada.
Este episodio simboliza el resultado del obrar por fe. La demostración de que en ese sentido lo "al parecer imposible", se hace inexplicablemente posible con la intervención de los principios nacidos de la fe en el máximo ideal de la perfección (Dios)
El encuentro con la casa del hermano del Señor simboliza el alcanzar la situación ideal buscada, siguiendo los dictados de la fe.. Una vez emprendido el camino, no abandonar la ruta, con la esperanza de que Dios proveerá la meta anhelada con sus medios inescrutables.

28.- Y CORRIÓ LA JOVEN Y CONTÓ EN CASA DE SU MADRE ESTAS COSAS.-

La nueva ley (Rebeca) o medio de formación futura de la Israel celestial, tomó enseguida contacto con su base de principios (su madre) Estableció una confrontación con su raíz original. En esta confrontación hizo patente los hechos que se le presentaban y que debía descifrar antes de proceder en algún sentido, dejando asentado el contacto establecido.

29.- Y TENÍA REBECA UN HERMANO QUE SE LLAMABA LABÁN. CORRIÓ ENTONCES LABÁN ADONDE ESTABA EL HOMBRE, AFUERA, JUNTO A LA FUENTE.-

Esta oportunidad de actuación o leyes (Rebeca) se origina de la misma raíz que el concepto del mismo nivel espiritual que ella (Labán)
Este concepto se coloca en la misma posición de captación o altura de aprendizaje que tiene el emisario de la promesa de la fe (esto es el siervo de Abraham) junto a la base de conocimientos de la que toma su sostén (la fuente de las aguas) No debemos perder de vista los símbolos que estamos interpretando, toda vez que estos símbolos son la base de una interpretación encaminada a presentar LO MESIÁNICO como una corriente siempre presente en los señalados y que ellos son la raíz santa de donde brota el Árbol de Vida, que es la palabra encerrada en estas escrituras.
Por eso debemos tomar simbólicamente toda la escritura y analizarla minuciosamente para poder entender el símbolo supremo de ella, LO MESÍAS, que es el todo de esta formación que señala el tupido tapete bíblico a través de toda la trama donde cada uno de los hilos se teje para formar el final esperado. Observemos que esta es la formación de LO MESÍAS, "no del Mesías".
Esta cualidad está presente para EL HOMBRE que alcance la facultad de ser "ungido" transmisor de estos conceptos a sus semejantes. Todos estos pasajes son pedazos de LO MESIÁNICO diseminados en la Biblia y que deben ser asimilados por los que acuden en busca de la raíz santa que Dios entregó al hombre en el día de su creación por medio del Hálito de Vida. La unión de estos pedazos, su interpretación "Y ACTUACIÓN" conduce a la formación del Todo, a "LO MESÍAS" en el corazón del que lo encuentra.
Cuando un hombre se convierte en expositor de este concepto supremo de fe, está actuando como Mesías de las cosas de Dios, siendo, en mayor o menor grado, un poco menor que los ángeles, como dice en la Biblia, ya que solo al representar el estado superlativo de ese grado, toma su "coronación" (por llamarlo de algún modo) toda vez que reina sobre la carne y manifiesta su espíritu como imagen de Dios verdadera.
Podemos decir que el fondo de toda idea que conduce a la fe en Dios es LO MESÍAS.
En cualquier religión, principio ideológico, etc., donde se establece el AMOR como fundamento, está la imagen de LO MESIÁNICO. Porque esto es EL MESÍAS, el reflejo del AMOR que emana de Dios para formación definitiva de "EL HOMBRE". Es esta la sustancia común de todas las religiones, que sólo se diferencian en la forma, copia de lo humano, y son iguales en el fondo por esencia de lo divino no manifestado aún por ninguna, donde todas están presas de la ley de los ritos que las diferencia y sectoriza.
Volviendo a la historia y reteniendo los lazos de formación MESIÁNICA, vemos que este Labán, será el suegro de Jacob (Israel) posteriormente.
Lo importante es establecer, muy claramente, que todos los elementos de formación de los padres de Israel, así como las leyes que lo conformaron, parten de la misma raíz, y que esta raíz es MESÍAS.

30.- Y SUCEDIÓ QUE COMO VIESE EL PENDIENTE, Y LOS BRAZALETES EN LAS MANOS DE SU HERMANA, Y COMO OYESE LAS PALABRAS DE REBECA SU HERMANA, QUE DECÍA: ASÍ ME HABLÓ EL HOMBRE; VINO AL HOMBRE; Y HE AQUÍ QUE ESTE ESTABA JUNTO A LOS CAMELLOS CERCA DE LA FUENTE.-

Los brazaletes y el pendiente que, como dijimos, señalan la conexión y compromiso de actuación de las leyes con algún concepto de donde proceden los brazaletes y el pendiente, motiva que los conceptos que guardan relación con las leyes originarias del mismo medio de donde procede la ley busque una confrontación o equiparación con los mismos para saber si la raíz del nuevo concepto que intenta utilizar esta ley para su crecimiento y manifestación tiene la misma procedencia que él. En términos simples.
Podemos decir que cuando un medio o sociedad cualquiera que es producto de una idea ya establecida, recibe nuevas formas de manifestación, o sea un ideal nuevo, se forma una cadena de acontecimientos que hace que se ponga a prueba la eficacia de ese nuevo ideal.
Esta es la forma correcta de tener apreciación de los nuevos principios que buscan establecerse en la sociedad, ya que la raíz de procedencia es la que tiene a su cargo las formas futuras que se han de implementar.
Labán representa una prolongación del principio ideal de donde parte esta ley que ha de ser utilizada para poner en práctica el principio de la promesa señalada para la raíz santa.
Rebeca es una condición propicia para que se manifieste el camino hacia la condición mesiánica.
Esto lo podemos comparar con cualquier época de la existencia humana, donde se ha de poner en práctica los principios derivados de las escrituras con los nuevos niveles del entendimiento humano que debe evolucionar hacia lo perfecto, donde se comprende que son de la misma naturaleza.
El hombre que tiene en su formación raíces del amor, que ha tenido su formación dentro de un ambiente propicio a la bondad, identifica inmediatamente las cosas de Dios cuando estas se presentan en su camino, aceptándolas inmediatamente porque las ve cerca de la fuente de las aguas, por usar el término simbólico aquí expuesto,
Debemos mantener presente que todo lo señalado en la Biblia tiene dos interpretaciones, la colectiva con relación al hombre en general, y la individual, en lo que respecta a cada uno de los hombres en su condición de partícula del cuerpo de "EL HOMBRE", al cual pertenece aún cuando esté ajeno a ello.

31.- Y LE DIJO: ¡ENTRA, BENDITO DEL SEÑOR DIOS! ¿POR QUÉ TE QUEDAS AFUERA? PUES TENGO PREPARADA LA CASA, Y EL LUGAR PARA LOS CAMELLOS.-

Y expresó que se introdujera aquel concepto emisario de la raíz santa. Que estaba bien ejemplarizado, bien dicho, BENDITO del Señor Dios. O sea que se veía claramente que partía del ideal máximo de la perfección para el hombre; LO MESIÁNICO estaba manifiesto en él.
Esto quiere decir que hay una identificación absoluta entre el hombre que busca las cosas de Dios, con los conceptos nuevos que provienen de la raíz santa o Espíritu Santo.
Señaló que todas las condiciones eran favorables para el acople y que todo estaba preparado para recibir el contenido de aquel reclamo que se manifestó con todas las señales necesarias.
Que estaban listas todas las condiciones requeridas para alojar las resistencias necesarias para el paso por las tentaciones y ausencias del desierto de la vida (esto simbolizado por el alojamiento para los camellos)
Aquí se hace patente la afinidad existente entre el hombre con raíces espirituales y los conceptos expresados en la Biblia.
Se ve como, inmediatamente, que quien lee la Biblia y tiene ansias en su corazón de comprender la razón de su existencia, acoge con júbilo y muestras de aceptación las enseñanzas mesiánicas que se vislumbran desde las primeras palabras impresas en ella.
Hacemos un aparte para señalar lo doloroso que resulta para quien no ve en ella mas que las palabras vacías e historias incomprensibles e inaceptables, en lugar de entrever el tesoro maravilloso que en ella se encuentra aguardando a que lo descubran para enriquecer al afortunado agraciado.

32.- VINO ENTONCES EL HOMBRE A LA CASA, Y DESCINCHÓ LOS CAMELLOS. ENTRETANTO LE DIO LABÁN PAJA Y FORRAJE PARA LOS CAMELLOS, YAGUA PARA LAVARSE LOS PIES, Y LOS PIES DE LOS HOMBRES QUE CON ÉL VENÍAN.-

Tomó el mismo nivel y se acopló a la casa o nivel espiritual de Rebeca. Eliminó los controles destinados a recibir las inclemencias de las tentaciones y pruebas (símbolo de descinchar los camellos) Después ofreció Labán conceptos purificadores para eliminar las impurezas del camino (agua para lavarse los pies)
Esto, simbólicamente, significa la limpieza con que debe tratarse todo lo relacionado con el camino de la promesa.
El lavatorio de pies es un simbolismo profundo que es usado constantemente por los integrantes de la escenificación del grado MESIÁNICO. De esta forma dejan sentado su condición de limpiador de los caminos del hombre para alcanzar la tierra prometida.
Todos los simbolismos bíblicos tienen la misma finalidad: demostrar su condición de limpiadores de los caminos del hombre por medio de los siervos de la condición humana en la ruta hacia su perfección.

33.- Y LE SIRVIERON DE COMER, MAS ÉL DIJO: NO COMERÉ HASTA QUE HAYA DICHO EL ASUNTO QUE ME TRAE. A LO QUE RESPONDIÓ LABÁN: HABLA.-

Le prepararon una enseñanza, un grupo de conductas a seguir (simbolizado por la comida) Los elementos que mantienen vivo el cuerpo espiritual, son las experiencias (esto es la comida, el pan de cada día) Este símbolo está bien definido y claro en toda la Biblia.
Es la razón de la existencia. Lo vemos en pasajes aclaratorios como:
    "Pan de luto comeréis"
    "Vosotros comeréis las grosuras de la tierra"
    "Descendió pan de los cielos (maná)"
Por eso, la interpretación simbólica de este concepto aclara infinidad de pasajes.
El emisario tenía un alimento que digerir, hacer la voluntad del que le envió, y no podría participar de la concepción filosófica que aquel medio le proporcionara, hasta terminar de comer su porción asignada anteriormente. (No comer hasta que no se haya dicho el asunto que me trae)
La representación o exponente de aquel nivel espiritual de donde procede Sara, manifestó el deseo de conocer la ejemplarización que le anunciaban.

34.- DIJO PUES: SIERVO DE ABRAHAM SOY.

Todo seguidor de una ideología, de un deseo o aspiración, es siervo de ello, pues esto domina su voluntad hasta alcanzarlo.
  • "Porque ellos son mis siervos los cuales yo saque de la tierra de Egipto". (Lev 25:42)
Este siervo era una representación de Abraham, ya que seguía los dictados que ''este le encomendara, y que dominaba su voluntad.
Hay infinidad de alusiones a la servidumbre que demuestran el significado simbólico de esta palabra. Se ordena no servir a ídolos vanos, no servir a los deseos de la carne, no ser esclavos de las riquezas vanas, en fin, es un término que denota bien claramente su condición de supeditación a algo.

35.- Y EL SEÑOR DIOS HA BENDECIDO MUCHO A MI SEÑOR, DE MODO QUE ÉL SE HA ENGRANDECIDO; PORQUE LE HA DADO REBAÑOS, Y VACADAS, Y PLATA, Y ORO, Y SIERVOS, Y SIERVA, Y CAMELLOS, Y ASNOS.-

El máximo ideal de perfección le ha introducido gran cantidad de buenos acontecimientos y experiencias acordes con su fe, que es el ideal que le domina y posee.
Cada vez crece más su poder, pues tiene seguidores (Rebaños y vacadas) y filosofías y conceptos luminosos y valiosos (plata y oro) y ejemplarizadores de su voluntad (siervos y siervas) que le sirven en el crecimiento de su hacienda espiritual.
Asimismo, tiene fórmulas potentes para resistir las tentaciones del mundo y soportes para aguantar las cargas de la vida. (camellos y asnos)
Esta representación simbólica, nos trae a Abraham hasta el presente como una fuerza viva, que guía y ordena a sus seguidores de hoy a seguir el camino de la fe que él representó tan fielmente.
La altura espiritual ejemplarizada en el cuerpo de Abraham, vive hoy en la multitud de los que le siguen y sienten como Abraham (padre de la fe y que es a la vez padre de multitudes) enriqueciendo y dando crecimiento a los que han de continuar el camino hasta cumplir la promesa aún vigente y que está en el camino de manifestarse al final de los tiempos en que los hombres alcancen el grado mesiánico o de Hijos de Dios, esto es, representantes de la imagen que Dios concibió para el hombre, con la semejanza de Su Amor manifestada en ellos.
Todas estas riquezas que el siervo enumeró en Abraham son símbolos alcanzados por su fe en el ideal supremo de la perfección (lo mesiánico) que irradia su luz a través de la lámpara de sus siete espíritus, de los cuales, no cabe duda, Abraham es uno de ellos, y tal vez de los más importantes, ya que irradia la luz de la fe, que es la base de toda comprensión de las cosas de Dios.

HAGA CLIC AQUÍ PARA CONTINUAR

Nota queremos destacar que los links relacionados que ofrecemos aquí, lo son sólo con el propósito de crear un directorio para los que buscan estas corrientes interpretativas y de ninguna manera implican el respaldo de este sitio con sus puntos de vista y poliza interpretativa o la veracidad de sus informaciones. Nosotros no tenemos control acerca del contenido de estos sitios que aquí presentamos. Los links son regularmente revisados y actualizados y esto no es bajo ninguna circunstancia determinante. Gracias.